¿Por qué sudan los pies?¿Qué es el sudor? Y todo lo que debes saber sobre hiperhidrosis

A todos nos ha pasado que, después de una caminata, de practicar algún deporte o quizá con sólo existir, nuestros pies generan una cantidad que consideramos excesiva de sudor y seguramente te has preguntado ¿por qué me sudan los pies?¿es normal tener pies sudorosos?¿es bueno sudar mucho?

Antes de abordar el asunto del sudor en los pies, debemos comenzar por entender el sudor, qué es y algunas de las funciones de la sudoración.

¿Qué es el sudor y por qué sudamos?

Lo primero y más elemental que debes saber es que el sudor es sólo la punta del iceberg de un complejo sistema de enfriamiento corporal.

Verás, el cuerpo consigue su mejor rendimiento cuando se encuentra a una temperatura entre los 36-37 ºC (unos 98.6 ºF ). Cuando nuestro cuerpo aumenta su temperatura debido a la actividad física, el cerebro buscará mantener una temperatura menor y más agradable para continuar trabajando de manera óptima, haciendo que el hipotálamo, el encargado de monitorear y controlar la temperatura corporal, envíe un mensaje a nuestras glándulas sudoríparas para que comiencen a hacer lo que mejor saben: producir sudor o transpirar.

Así es como comienza a generarse el sudor que termina por salir de nuestra piel a través de los poros o los folículos pilosos. El propósito de esto es que el sudor entre en contacto con el ambiente, el aire lo evapore (convierta el agua en vapor) y con esto logres enfriarte y ¡vivir la vida a plenitud!... bueno con pasarla un poco mejor es suficiente.

El sudor es 99% agua y pequeñas cantidades de otras sustancias químicas como el amoníaco, urea, sales, minerales como potasio y sodio, azucares y lactato.

Considerando lo anterior, cuando estás sudando demasiado en un día caluroso o después de jugar de manera intensa, lo más seguro es que estés perdiendo agua y minerales elementales para tus funciones corporales y musculares, por lo que es recomendable reponer esta agua bebiendo líquidos para evitar la deshidratación e incluso los calambres musculares.

Se calcula que una persona promedio puede perder entre 0.7-1.8 litros de agua por hora, durante una actividad corporal intensiva, aunque también influye la humedad y la temperatura del ambiente.

                Fuente: Muy Interesante

Quizá esto pueda sonar radical, pero las glándulas sudoríparas están a lo largo y ancho de todo tu cuerpo (glándulas ecrinas) y segregan sudor a través de los poros, mientras que otras glándulas se encuentran principalmente en zonas donde el cabello es abundante, porque su excreción depende principalmente de un folículo piloso (glándulas apocrinas).

Glándulas sudoríparas, folículo piloso y poro. Imagen: Mayo Foundation

Como ya te habrás podido dar cuenta, es bueno sudar o transpirar, descuida principalmente cuando se trate del resultado del ejercicio, porque eso significa que tu sistema de ventilación está funcionando a la perfección.

En ocasiones puede ocurrir que algún determinado tipo de tela o material en ropa o calzado no favorezca la transpiración, provocando que no podamos refrescarnos o ventilarnos apropiadamente, provocando que nuestro cuerpo continúe generando sudor; sin embargo, no es tan bueno sudar mucho si no parece haber un causa clara, ya que puede indicarnos cambios hormonales, infecciones o hiperhidrosis.

¿A qué se debe la transpiración en los pies?¿Es bueno transpirar mucho?

Durante nuestro desarrollo en este planeta, el poder sudar por prácticamente toda la piel ha sido una buena forma de mantenernos en movimiento por un tiempo considerable sin sucumbir al exceso de temperatura. Los pies son una de las piezas clave de ese sistema de enfriamiento corporal y una de las partes más sudorosas del cuerpo, pues se sabe que concentra cerca de 250 mil glándulas sudoríparas, cumpliendo una función muy importante en la regulación de la temperatura del cuerpo.

No obstante lo anterior, algunos desequilibrios en el sistema endócrino, pueden desencadenar el sudor excesivo, haciendo aún más notoria la considerable cantidad de sudor que producen los pies. 

Otras anomalías pueden cambiar la composición misma del sudor, promoviendo el mal olor en los pies. Esto no necesariamente es permanente, pero en ocasiones desencadena patologías o enfermedades que se pueden catalogar en tres tipos de problemas relacionados con el sudor excesivo, irregular, mal oliente o "sudor fuerte" según sus síntomas o signos:

• Hiperhidrosis: es el exceso de sudoración y tiene relación con el aumento de presión, estrés, temperaturas altas, así como la alimentación, infecciones o con algunas enfermedades crónicas. Cuando el exceso de sudor en los pies está más focalizado a las plantas de los pies, se le conoce como hiperhidrosis plantar y cuando las sudoración excesiva se observa en las manos, se trata de hiperdrosis palmar.
• Bromhidrosis: es un sudor con aroma fuerte e incluso desagradable; comúnmente causado por cambios metabólicos durante la adolescencia, por micosis o infecciones.
• Cromohidrosis: es un trastorno en el que las glándulas producen sudoración con color, que se observa, sobre todo, en tela blanca (calcetines, camisetas…).

¿Por qué olemos mal cuando sudamos o transpiramos en exceso?

Como ahora sabes, el mal olor en los pies no se debe a la cantidad de sudor que es mayormente agua, lo que provoca el mal olor en pies está más relacionado con cambios en nuestro metabolismo, cambios hormonales y en casos de mala higiene, por agentes externos como bacterias u hongos (micosis).

Tratamiento para eliminar o evitar el sudor de pies

La buena noticia con las causas externas del sudor excesivo y del mal olor, principalmente del focalizado en los pies, es que actualmente contamos con eficaces tratamientos para eliminar o evitar la sudoración de pies y sus malos olores: desde talcos, pomadas, cremas antimicóticas o antibacteriales, sprays, antitranspirantes, aceites, jabones y algunos remedios caseros como el extracto de hoja de olivo o listerine.

Glándulas sudoríparas bajo el microscópio. Imagen: Internet

No obstante con estos tratamientos para el sudor, no siempre las causas de la sudoración excesiva en los pies se encuentra en el exterior de nuestros cuerpos, en algunas ocasiones, el sudor de los pies tiene su origen en trastornos del funcionamiento de las glándulas sudoríparas, por lo que responden de forma inusual hacia algunos estímulos que detonan la producción de sudor sin que se logre regular su emisión.

Estos casos resultan complejos y pueden controlarse con medicamentos para reducir el estrés, antidepresivos y últimamente ha cobrado gran notoriedad por su aparente eficacia, la aplicación de toxina botulínica ("botox"), una neurotoxina producida por la bacteria denominada Clostridium botulinum. 

Este tratamiento consiste en la administración subcutánea de botox, neurotoxina que bloquea la conducción nerviosa disminuyendo la actividad de músculos y glándulas sudoríparas. Este efecto se debe a que impide la liberación de acetilcolina, sustancia que hace que las glándulas sudoríparas produzca sudor. La acetilcolina también hace posible que los músculo se contraigan, por eso, la toxina butolínica es efectiva para eliminar lineas de expresión o arrugas.

Con este tratamiento se logra eliminar o disminuir la cantidad de sudoración en la zona intervenida de forma progresiva entre 1-2 semanas. El botox (toxina botulínica) elimina el sudor en la zona inyectada, normalmente axilas, plantas de los pies y palmas de las manos, por un periodo de 6 a 8 meses y se puede repetir las veces que sea necesario.

Ahora ya lo sabes, sudar o transpirar en exceso o en cantidades poco usuales no necesariamente está mal o implica atención especializada, pero si consideras que algo no está bien, lo mejor es acercarse a un médico para que nos brinde atención y orientación sobre nuestra condición particular.

Fuentes: Clinica Mayo, KidsHealt, Salud Bayer